Montes-Berwig: "No teníamos más motivación para seguir jugando. Ahora aspiramos a dar lo mejor de nosotras "
10 de marzo de 2005, de la Redacción de Padelcenter.com
Dos años atrás, conformaban una de las parejas más poderosas del padel femenino internacional. Sin embargo, la desmotivación las llevó a dejar la competencia y retirarse a una edad prematura, dejando al circuito sin la posibilidad de verlas jugar por un largo rato. Cuando Caro Navarro se lesionó, Iciar Montes fue tentada para volver como compañera de Paula Eyheraguibel, y las ganas volvieron a vibrar. Con Paula ganó el Mundial por parejas y ese fue el punto de partida de un retorno que ahora será completo, ya que volverá a competir junto a su compañera, la brasileña Necki Berwig.
¿Por qué la decisión de dejar de jugar, hace dos años?
N. B.: Por más increíble que parezca, quería hacer otras cosas en mi vida, ya no tenía ilusión de jugar. El pádel es parte de mi vida, pero no lo es todo, siempre tomo mis decisiones con el corazón.
I. M.: En mi caso, desde el 2001 empecé a darme cuenta de que ya no me llenaba la competición como antes. El 2002 jugué desmotivada, a pesar de que los resultados fueron muy buenos.
¿Entonces fue una decisión planificada, lo venían pensando?
N. B.: Pues la verdad es que yo lo venía pensando durante el año, por la forma en que me sentía en la pista cada vez que jugaba. Sabía que debía aprovechar la oportunidad, pero que al mismo tiempo no tenía la ilusión. Era importante para que yo creciera como persona, emocionalmente, y entonces ya sabía que tenía que ser así.
I. M.: La verdad es que yo casi paro en el 2001, pues no tenía muy claro si quería jugar un año más, pero el 2002 era año de Mundial, no quería dejar pasar la oportunidad y también tenía compromisos con los auspiciantes.
¿Y por qué volver? ¿Recuperaron las ganas?
N. B.: Yo hice muchas cosas en estos dos años en Brasil, y mi vida otra vez me ha llevado a vivir en España. A raíz de ver que Iciar volvía a jugar, pensé que debía aprovechar la oportunidad, porque en ese momento creo que va a ser bueno estar ahí otra vez para aprender muchas cosas que quizás me han faltado.
I. M.: Mi caso es un poco diferente, cuando empecé con las funciones de Seleccionadora Española, al tomar contacto con las chicas, con las competiciones... empecé a plantearme volver para la temporada 2005. Incluso ya estaba buscando pareja. Entonces fue cuando Paula me llamó por lo de Carol y me arriesgué a volver antes, aunque fuera precipitado y pudiera ser un desastre.
¿Cómo fue el planteo para volver a jugar juntas? ¿Una "contagió" las ganas a la otra?
I. M.: Yo había quedado con una jugadora (prefiero no decir quien es) en que tomaría la decisión en el torneo de Bilbao, en octubre. Yo estaba segura de que volvía, ya que había terminado el año jugando con Paula, entonces fue cuando Necki se animó y decidimos rearmar la pareja.
N. B.: Yo no me había planteado volver a jugar porque cuando lo dejé ya estaba satisfecha, porque como te he dicho, el pádel no es todo en mi vida. Fue una forma de aprender y de venirme a España. Como he dejado de jugar pero estoy viviendo en España otra vez, he querido aprovechar la oportunidad. El primer año, cuando volví a Brasil, mi mamá enfermó y al poco tiempo murió. Tuve un año bastante atípico, porque mi papá también tiene problemas de salud y tuve que estar ahí cuidándole y organizando las cosas de casa junto con mis hermanos.
¿Y nada de pádel?
N. B.: No, nada de pádel, pero me mantuve de físico, aproveché para hacer otras cosas. Estuve viviendo en un pueblo, y ahí resulta difícil encontrar gente para jugar.
I. M.: Yo empecé a jugar un poco de pádel cuando comencé con lo de la Selección.
¿Y qué estuviste haciendo por afuera del pádel?
I. M.: Pues estudiar un master de Psicología Transpersonal (“algo así como estudiar al ser humano desde un punto de vista más holístico, que somos más que un cuerpo; las emociones, la utilización de nuestra energía... con vistas a mejorar nuestra vida” según las palabras de la propia Iciar, cuando le consultamos que era), traducir varios libros para editoriales españolas y brasileñas... Siempre he estudiado temas referentes al autoconocimiento, superación de uno mismo, evolución consciente.
Necki, el pádel masculino brasileño está pasando por un buen momento ¿que le falta a las chicas para alcanzar nivel internacional, y poder mezclarse entre las argentinas y españolas?
N. B.: Llevo un año viviendo en España y no estoy muy al día de lo que sucede en el pádel de Brasil, pero creo que aún hay un escalón y que no hay jugadoras que provengan del tenis de competición como ha pasado aquí en España, por ejemplo.
Iciar ¿En España está faltando renovación?
I. M.: Creo que el nivel está subiendo, las jovencitas están cada vez más fuerte, pero también creo que existe un vacío generacional, un hueco que tardará en llenarse, quizás a medio plazo.
¿Puede ser lo mismo que pasaba en Argentina hace dos o tres años?
I. M.: Creo que puede ser algo así. Ahora las argentinas tienen varias jugadoras por debajo de veintiséis años con un nivel muy alto.
En los partidos de pretemporada que están haciendo ¿como ven el rendimiento de la pareja con respecto al 2002?
N. B.: No sabemos, desde luego estamos más compenetradas que antes, pero eso no se sabe hasta que empiezan las competiciones. Tampoco en la pretemporada del 2002 imaginamos que íbamos a tener el rendimiento que tuvimos.
I. M.: Opino como Necki, los entrenamientos, aunque sean partido, no tienen nada que ver con las competiciones. Jugar bien y competir no es lo mismo.
¿Y tácticamente cambian algo, o van a ser la misma pareja?
N. B.: ¿Qué táctica teníamos?
...Ya entendí, van a seguir igual
I. M.: Bueno, intentaremosmejorar nuestro juego y estar unidas en la pista, esa es mi táctica "la unión hace la fuerza". Siempre he creído en el juego en equipo, lo importante es adaptar las características de cada una para sacar el máximo rendimiento de la pareja.
Después del último año que compitieron, que les fue excepcional ¿no sienten que el hecho de volver puede llegar a poner en riesgo la imagen de la pareja?
N. B.: Puede ser un riesgo, pero mi decisión está por encima de esas cosas. No voy a dejar de aprender un montón de cosas ni de mejorar por ese tipo de cosas
I. M.: En mi opinión, cada temporada empieza todo de nuevo, no se sale a la cancha con los títulos bajo el brazo. Siempre existe el riesgo de perder, pero eso no desvirtúa lo ya conseguido.
¿Se toman este retorno con la misma exigencia que en el 2002?
N. B.: Creo que sí, porque yo soy así, en cualquier cosa que hago en mi vida intento estar entera en lo que estoy haciendo, sacar lo mejor de mí. Ahora tengo más experiencia y estoy tranquila, ya he pasado por otras cosas en mi vida que han sido mucho más importantes y que quita un poquito el peso de lo que voy a hacer ahora.
I. M.: Mi exigencia en competición es siempre la misma; dar lo mejor de mí y sacar el máximo rendimiento posible.
¿Apuntan al número uno?
N. B.: Si lo que tengo dentro de mí para sacar (junto con lo que tiene Iciar) dentro de la pista es suficiente para estar en el número uno, así lo será.
I. M.: Mira, hay algo que siempre he tenido muy claro, y es que las personas debemos aspirar a dar lo mejor de nosotros mismos, ser nuestro número uno. Si soy la cien del ranking pero doy todo, entonces habré conseguido el objetivo, pero si estoy en el número uno del ranking y no estoy dando todo lo que puedo dar, entonces aún no he tocado techo.
¿Cambió el circuito actual con respecto al que dejaron ustedes?
N. B.: Sí, creo que ha mejorado el nivel, existen parejas muy buenas.
¿Quiénes les parece entonces que pueden ser las parejas a vencer?
I. M.: Creo que ha subido el nivel de base, y destacaría el subidón de las jugadoras argentinas, de las más jóvenes y también de las veteranas. Además de las tres o cuatro de siempre, actualmente casi cualquiera de las que compiten te dan pelea. |